Los dependientes emocionales son personas que tienen tal necesidad de cariño, que aceptan todo de su pareja con tal de estar junto a ella
Se podría decir que los dependientes emocionales padecen una especie de adicción porque, por mucho que su pareja les haga desplantes, no paran de intentar complacerla. Es uno de las peores relaciones tóxicas.
Ya te puedes imaginar, lo que puede hacer con los dependientes emocionales alguien que sepa aprovecharse de sus puntos débiles. Porque los dependientes emocionales aguantan lo que sea de las personas que considera importantes en su vida. Sienten un miedo espantoso a que les abandonen o las rechacen. Por eso, pagarán cualquier precio, incluso económico, por unas palabras de cariño o de aprobación.
En el fondo, los dependientes emocionales se sienten tan débiles e inseguros, que necesitan como el respirar que alguien los quiera. Aunque para ello, pierdan su dignidad.